Tal y como se deduce de los estudios de la Sociedad Americana de Ingenieros de la Refrigeración, pioneros en la conservación de prendas de piel en frío, "las condiciones de mantenimiento adecuadas para la conservación de prendas de piel en Cámaras Frigoríficas se establece entre 2 y 4 ºC". A dicha temperatura, se hace imposible la cría de polilla -el principal enemigo de nuestros abrigos- y, de haberla, se acaba con ella.
De este modo, nuestra CÁMARA FRIGORÍFICA se encuentra entre esta horquilla de temperatura las 24 horas del día y los 365 días al año.
Del mismo modo que el calor es perjudicial para la piel, también lo es la humedad. Los curtidos absorven esa humedad que, al secar, provoca que se acartonen. Así, nuestra Cámara se mantiene constantemente en unos niveles de humedad en torno al 55%.
Tenga en cuenta que, incluso en invierno, nuestros hogares se encuentran a unos niveles de humedad superiores en la mayoría de los casos al 75%.